Problemas y politicas de la educación básica ~ Abel Luna Che ~ 1° Semestre grupo 'A' ~ LESET ~ Benemerita Escuela Normal Veracruzana Enrique C. Rebsamen

jueves, 15 de diciembre de 2011

Capítulo X. Algunas implicaciones de la calidad


La calidad tiene implicaciones de cambio cultural profundo en la organización. Un movimiento hacia la calidad requiere de un esfuerzo sostenido de todas las personas involucradas. Un movimiento hacia la calidad exige un trabajo en equipo.
En este último capítulo se hace referencia a las implicaciones menos tratadas hasta ahora, éstas son:

  • crítica y autocrítica
  • valorar la diversidad
  • los consensos
  • la relevancia
  • la justicia
  • la credibilidad en nuestros alumnos
  • el compartir logros


Critica y autocritica
El punto de partida de todo proceso de mejoramiento de la calidad es la insatisfacción con un estado de las cosas. La crítica es parte constitutiva del mejoramiento de la calidad, la única condición es que ésta genere sugerencias, sea creativa, constructiva y conduzca a que todos mejoremos. Para que realmente pueda darse un proceso de crítica y autocrítica, en un ambiente de libertad, es necesario que esto se trate abiertamente en las reuniones de equipo al iniciar un proceso de mejoramiento de la calidad.  
La calidad implica valorar la diversidad.
La pluralidad de puntos de vista es lo que enriquece la posibilidad de encontrar soluciones. En un proceso de mejoramiento de la calidad, todos formamos parte de una misma empresa. Llegaremos a construir una identidad de la escuela en la que trabajamos. Pero esa identidad no puede estar construida sobre la base de igualar lo que todos pensamos, seremos algo distinto justamente por nuestra capacidad de construir una unidad a partir de las diferencias.

La calidad implica consensos
Llegar al consenso entre personas que piensan igual no es nada difícil. Basta proponer algo que todos compartan para que todos digan sí. Llegar al consenso entre personas que piensan diferente, en cambio, significa que tenemos que analizar el problema a fondo, discutir sus implicaciones y sus causas, proponer soluciones diversas, defender y argumentar sus implicaciones. El consenso es necesario en un proceso de mejoramiento de la calidad. Llegar a él, sin perder el respeto a nuestra diversidad.

La calidad implica relevancia
Lo más importante son los beneficiarios, y todo lo que hacemos tienen como punto de referencia la satisfacción de sus necesidades. El beneficiario es la referencia obligada de todo proceso de mejoramiento de la calidad. Es lo que motiva el plan. Sin embargo, en el quehacer educativo cotidiano, y en lo que nos corresponde a todos nosotros como docentes, este postulado fundamental se traduce en la palabra relevancia. La falta de relevancia de los aprendizajes que ofrece la escuela explica buena parte de su falta de calidad. La relevancia no se puede entender como la entrega de un conjunto de datos “relevantes” a los alumnos, en el sentido de que dichos datos sean cercanos a lo que experimentan en su vida cotidiana fura de la escuela. Lo verdaderamente relevante es la habilidad para comprender la lengua escrita y para expresarse como escrito. Las habilidades sin embargo, si pueden desarrollarse a partir de los contenidos que privilegien aquello que los alumnos se interesen de manera especial.

La calidad implica justicia
Significa que la calidad se preocupa más por la justicia que por la igualdad. Igualdad es ofrecer lo mismo a todos. Justicia es dar más a quienes menos tienen. No nos podemos conformar con dar una clase, esperando que los alumnos la aprovechen de acuerdo con sus capacidades que, como ya indicábamos, son diferentes, es necesario buscar permanentemente la manera en que todos los alumnos, independientemente de sus características, alcancen los objetivos que no hemos trazado.

La calidad se comparte
Cuando hablamos de educación básica, el mejoramiento de la calidad no es para que nuestra escuela sea la única buena, sino para que todas sean mejores.
Tenemos la obligación de compartir con nuestros colegas maestros, y con nuestros superiores y autoridades educativas, nuestros logros y las formas en que las hemos obtenido.
Si logramos esto, estaremos propiciando una transformación del sistema educativo que, en lugar de hacerse de arriba hacia abajo, desde la planificación educativa tradicional, estará siendo impulsada desde la base hacia la cúspide.

Comentario:
            La autocrítica nos permite saber que nos está fallando. Y las demás implicaciones nos ayudan a realizar una mejor autocritica de lo que nosotros consideramos que ya cumplimos con la calidad (aunque recordemos que esta nunca se alcanza en si.)

Bibliografía:
Schmelkes, S. (1995). Capítulo X.-Algunas implicaciones de la calidad. En Hacia una mejor calidad de nuestras escuelas. (pp. 117-125).México: SEP.



Capítulo IX. La calidad necesita de la participación de la comunidad

En la educación básica no se puede entender la calidad sin una activa participación de los padres de familia, que debe ser propiciada por la escuela.

El ideal se encuentra en que la comunidad haga propia la escuela, la apoye y se involucre con ella como agente activo en proceso permanente de mejoramiento de la calidad, y para ello se requieren metas viables y objetivos comunes. Esto es importante, ya que un trabajo conjunto producirá mejores y mayores resultados que el esfuerzo aislado de una de las partes. Algunas ideas de cómo propiciar la participación de los padres de familia y la comunidad son:

1.       Desde el aula: aprovechando los conocimientos, habilidades, valores y actitudes de nuestros alumnos, los cuales son adquiridos en su familia y comunidad, así como también involucrando a los padres de familia y a los demás miembros de la comunidad, en las tareas escolares y por último, haciendo participar a personas de la comunidad en la impartición de clases específicas. 

2.       La creación de un ambiente familiar propicio al aprendizaje: ya que los problemas dentro del núcleo familiar afectan en gran medida al trabajo académico de los alumnos, algunos de estos problemas son: una mala nutrición, higiene, salud, conocimiento de las etapas de desarrollo del niño y sus requerimientos, así como la importancia de un ambiente familiar estable y afectuoso, y por último el apoyo familiar al trabajo escolar de los niños.

3.       El apoyo especial de los padres a los alumnos rezagados y/o a los que presentan problemas especiales de aprendizaje: el mecanismo para lograr esto es a través de las visitas domiciliares, ya que por lo regular estos padres nunca asisten a las reuniones, ni a los llamados por parte del maestro.

4.         Otros aspectos en los que pueden establecerse relaciones entre la escuela y la comunidad: El Consejo Técnico es el espacio idóneo para llevar a cabo estas actividades. Conviene que el tema “relación escuela-comunidad” se encuentre en todas las reuniones de este consejo, ya que podrá  plantarse la vinculación escuela-comunidad que rebasa el espacio del aula.

Todas estas actividades contribuyen a establecer un clima comunitario cordial y colaboración que no sólo evita los innecesarios desgastes, sino que estimula a los participantes. El maestro obtendrá satisfacciones para atender en forma integral el proceso de aprendizaje de sus alumnos.


Comentario
Podemos observar que la participación de los sectores externos de las escuelas más estrechamente vinculadas con la comunidad son las que mejores resultados de aprendizaje logra, por lo que es importante entender que la escuela está en la comunidad y la comunidad en las escuelas, y que necesitan de su mutuo apoyo para avanzar en el mejoramiento de los procesos escolares. La importancia de la vinculación escuela-comunidad, radica en el facilitar la realización del trabajo académico, establecer un clima comunitario cordial y de colaboración que evita los desgastes innecesarios y estimula a los participantes.

Bibliografía:
Schmelkes, S. (1995). Capítulo IX.-La calidad necesita la participación de la comunidad. En Hacia una mejor calidad de nuestras escuelas. (pp. 101-116).México: SEP.

Capítulo VIII. La planeación y la evaluación para la calidad

La búsqueda de la calidad se inicia con el reconocimiento de la existencia de un problema, puede ser de dos tipos: una preocupación por los resultados deficientes que la escuela está produciendo, o una preocupación por los procesos deficientes que la escuela está desarrollando y procede de diversas fuentes.

  • Beneficiarios insatisfechos,  como son los padres de familia, las escuelas que reciben a los egresados, la comunidad y los propios alumnos (los cuales emiten quejas).
  • Críticas emanadas del propio personal que labora en la escuela.
  • De la dirección, propiciado por el reconocimiento de que las cosas pueden ser mejores.

Es el director el que tiene la idea de cómo deben ser las cosas mejores, lo que sigue es hacer que esa idea se convierta en un plan. Para pasar esa idea a plan es necesario conocer bien problema, sus causas y sus posibles soluciones, y dicho plan tendrá contar con las siguientes características:

  • Debe elaborarse en equipo.
  • Debe comenzar por estabilizar los procesos, o por definir la estabilidad existente.
  • Debe diseñar los resultados.
  • Debe privilegiar los procesos de prevención del problema.
  • Debe privilegiar la disminución de las variaciones por encima de la elevación del promedio.
  • Requiere programas más precisos. 
El plan debe traducirse en nuevas prácticas, que deben definirse con claridad de manera que sean entendidas por todos. Las prácticas consideradas necesarias para modificarlos, se revisen en forma permanente por parte del propio equipo que las definió, llamado monitoreo, además éste término se refiere a la actualización de las personas en sus prácticas cotidianas y nos importa también a todos.

El monitoreo es trabajo grupal que requiere de: esfuerzos de las personas, actitudes, constancia, capacidad crítica y autocrítica, y  creatividad.

         Para poder monitorear se necesitan criterios, y nunca se debe de perder el objetivo último, que se refiere a la satisfacción del  beneficiario de la acción educativa en cuestión. Una vez que se halla llevado a cabo el plan es necesario que se evalúen los resultados y comprobar  si se logró abatir el rezago escolar.

En la evaluación se trata de verificar por medio de los resultados y no de verificar los resultados mismos, si no es así, estaremos hablando simplemente de inspección. Un punto que se considera importante en tales procesos es el ciclo PHRA:

  • Planificar: hacer planes de mejoramiento en las prácticas actuales a partir de datos sólidos.
  • Hacer: es la aplicación del plan.
  • Revisar: significa ver si se ha producido la mejoría deseada.
  • Actuar: es prevenir la recurrencia o institucionalizar el mejoramiento como una nueva práctica para mejorarse.


Comentario:
Es muy importante que exista la planeación en la educación, porque sólo así se trabajará con más esfuerzo en los puntos que se quieren mejorar tanto en la calidad como en la equidad, la justicia y la igualdad. También considero importante tener en cuenta el trabajo en equipo, pues con ello se lograra tener una buena planeación para la educación. Pero esta planeación solo se hará correctamente si se toman las medidas necesarias para realizar monitoreos constantemente y si se le da la importancia debida al por qué de los resultados que arrojan las evaluaciones. Como ya hemos venido viendo, la educación necesita que se apliquen evaluaciones constantes en los planteles educativos para que se esté informado de cómo se encuentra el aprovechamiento escolar.


Bibliografía:
Schmelkes, S. (1995). Capítulo VIII.-La planeación y la evaluación para la calidad. En Hacia una mejor calidad de nuestras escuelas. (pp. 89-100).México: SEP.

Capítulo VII. La calidad conduce al mejoramiento continuo de las personas involucradas

La filosofía de la calidad supone que cuando hay una mala supervisión y una mala gestión de la organización, provoca que la persona no esté orgullosa del trabajo que realice, se ausente, llegue tarde, pierda el interés por hacer las cosas, cambie de trabajo o de escuela frecuentemente. Pero  cuando una persona se siente importante en un trabajo, hará todos los esfuerzos por quedarse en él.

El problema de la calidad no reside en los docentes, sino en el sistema con que se opera la escuela, pero sí depende del equipo de docentes, siempre y cuando este equipo sea capaz de modificar el sistema. Esto es así porque están mejorando la calidad de vida en su trabajo y merece ser mejorada en forma constante. La filosofía de la calidad está orientada a las personas y dirigida a sus refuerzos para que desarrollen al máximo sus potencialidades.

Los valores, un proceso de mejoramiento de la calidad, y los valores que parecerían deseables formar en nuestros alumnos. Son valores que nosotros podemos vivir en forma congruente al participar en un proceso de mejoramiento de la calidad:

La identidad.
Adquirimos identidad profesional, porque desarrollamos nuestras capacidades como docentes. El logro de la identidad individual y social es un proceso relacionado con ambas etapas de desarrollo del niño, además la identidad está en la base de los derechos humanos fundamentales (el respeto y la dignidad) para el logro de la identidad, que se considera clave para la existencia de oportunidades de al menos tres tipos.

  • La participación creativa
  • La diversidad. El hecho de enfrentarse al otro y a los otros como diferentes.
  • El autoestima. Autoestima de identidad son indisolubles, la primera es más frágil que la segunda y está afecta a la otra.

La libertad, la responsabilidad y el respeto al bien común.
La libertad debe entenderse como el derecho a elegir, pero conociendo las consecuencias de la elección y haciéndose responsable de ellas. La escuela propicia múltiples espacios de elección libre, en el interior del aula ocurren los procesos de vida democrática, la elaboración de reglamentos internos propios de cada grupo con sanciones establecidas, además se generan espacios privilegiados para la vivencia de la libertad en el respeto al bien común.

La equidad y la justicia.
La equidad consiste en brindar oportunidades iguales a todos. La justicia consiste en dar más a quien lo necesita. La escuela debe ofrecer oportunidades para vivir la equidad como condición sin la cual no se puede vivir la justicia.

La solidaridad y el compromiso.
Sin solidaridad no es posible emprender un proceso de mejoramiento de la calidad, esto es así porque la calidad está en los procesos y en los procesos participamos todos. La solidaridad tiene que ver con la identidad colectiva, pero también con las manifestaciones de voluntad de apoyar a quienes lo necesitan,  en este sentido se plantean los objetivos escolares como objetivos del grupo.

La congruencia.
Este valor representa el cierre de los anteriores y de otros más que resulten esenciales y se favorece en la medida en que se privilegien los procesos de conocimiento que suponen su construcción. En concreto los procesos de investigación, descubrimiento, desarrollo del juicio crítico independiente y la metodología del diálogo son indispensables en el proceso de logro de congruencia y consistencia.





Comentario:
Se nos muestra que las fallas educativas son más que nada culpa del sistema, pero éste no va a cambiar solo. Lo que verdaderamente se requiere son docentes comprometidos con su profesión, docentes con vocación, el docente tiene que aportar todos sus conocimientos hacia los educandos con menor o mayor índice de desarrollo integral. Sin embargo, para ello se requiere ser una persona íntegra en toda la extensión de la palabra, con conocimientos, habilidades, valores y actitudes, para que éstas puedan ser transmitidas a los alumnos. Podemos afirmar que al participar en un proceso de mejoramiento continuo de la calidad, nos podremos desarrollar integralmente como personas y, a su vez, seremos capaces de formar personas integras.

Bibliografía:
Schmelkes, S. (1995). Capítulo VII.-La calidad conduce al mejoramiento continuo de las personas involucradas. En Hacia una mejor calidad de nuestras escuelas. (pp. 77-88). México: SEP.